El pasado diciembre nuestra Universidad entregó a Osvaldo Bayer el título de Doctor Honoris Causa y con este motivo, el docente y director de la Cátedra Libre del Agua, Anibal Faccendini, entrevistó al distinguido historiador y dialogó sobre la democracia actual y el rol de la Universidad. Los invitamos a leer este interesante intercambio de ideas.
El encuentro se realizó horas antes del acto académico programado para las 18 en la Facultad de Derecho. El clima cálido de esta época del año tiñó la reunión con la misma calidez que manifiesta la persona de Bayer. Con la sensación de sentirse «como en casa» Faccendini y Bayer dialogaron por un buen rato sobre el rol de la universidad, la juventud, la ética y la democracia actual, entre otros temas que convocaban a los dos interlocutores con mucha pasión.
Exiliado durante muchos años, defensor eterno de los derechos humanos, historiador, periodista y escritor, con sus 88 años, Bayer, demostró en esta entrevista, que sus ideales perduran intactos, al igual que su elocuencia al hablar y la enormidad de su persona.
A continuación les acercamos la transcripción del diálogo entre Faccendini y Bayer:
-¿Consideras que la universidad es un ámbito para el pensamiento crítico o es un ámbito de integración hacia los mercados?
-Bueno es muy variada. Según la Universidad, cada una tiene su línea, de acuerdo también en la nación en que se vive. Yo estuve en varias universidades de Europa y Argentina, y sinceramente en Alemania, que era justamente después de la posguerra, hubo una elección bien intelectual, una educación bien moral, bien ética.
La pregunta fundamental era como fue posible que Alemania se dedicara al racismo, cómo fue posible que hiciera la guerra. Esos temas fundamentales eran de todos los días y las organizaciones estudiantiles también repararon sobre esa temática.
Yo creo que la universidad debe ser una escuela de la ética, una escuela del futuro. Pensando en lo que puede ser
el futuro para esas nuevas éticas en los cuales está enseñando y la ética tiene que ser la gobernante de todas las cátedras y también por supuesto el amor a la ciencia y el amor a la ciencia tiene que traer el amor a la paz. No una ciencia para la guerra sino para la paz y para la igualdad.
-¿Para vos es muy importante la crítica como arma de la razón?
-Justamente la crítica tiene que ser un arma de la polémica, la crítica tiene que ser un alma de la democracia, enseñar la crítica constructiva desde chico y realmente trabajar sobre esa temática.
-¿Cómo crees que debería participar a la juventud para transformar la realidad?
-Es fundamental la juventud para el futuro de cada país y se debe trabajar en la escuela, ya en la escuela secundaria, sobre tener las armas de la crítica y del juzgamientos y también por supuesto en la universidad, trabajar las
tendencias políticas, estudiar la historia de todas las tendencias políticas, allí donde fracasaron y allí donde
triunfaron, realmente las próximas historias hay que formarlas en las escuelas. En los colegios y las universidades. Ahí tiene que estar la solución para encontrar el sueño de Carlos Marx y lo que decía el filosofo Kant la paz eterna.
-¿Consideras que la ética es lo más importante para los estudiantes en cualquier carrera universitaria?
-La ética es la defensa de la vida, es la defensa idealmente de la conducta de paz, en sí, por eso tiene que ser un arma principal.
-¿Considera que actualmente la evolución que se ha producido en la tierra va hacia un camino de una paz duradera con equidad social y ambiental?
-De ninguna manera. Mientras existan las fronteras, fábricas de instrumentos de guerra, exista el afán de ganar dinero y mientras exista realmente el estado capitalista, va a estar siempre la división de fronteras, va a estar siempre la búsqueda de la fuerza para imponer la injusticia. El mundo tiene que buscar un sistema realmente en donde no haya hambre de nuestros niños y terminar con las fronteras, encontrar un idioma internacional para entenderse
todos los habitantes del mundo.
-¿Hay una pedagogía en general de la escuela primaria de establecer los cimientos fundamentales de denuncia de las injusticias?
-Yo no la conozco. Encontré en Alemania de la posguerra una búsqueda de eso. La derrota había sido demasiado grande y se buscaba el por qué pero entró después el capitalismo y entonces ya las esperanzas y ya las costumbre tomaron otro ritmo. El capitalismo en vender es introducirse en los países para hacer mas baratos sus productos e imponerse sobre otros. Además, mientras haya ejércitos nunca habrá paz.
-¿Por qué pensas que el capitalismo ha triunfado en casi todo el mundo?
-Porque los pueblos no han sabido defender sus derechos. Tenían mucha razón los anarquistas, los libertarios, si todo se resuelve en asamblea, sin autoridades, se demorara mucho en todo pero habrá libertad y todos se sentirán protagonistas. Hay que encontrar una forma para que realmente la sociedad funcione con todos.
Cuando yo tuve la experiencia de las asambleas barriales en argentina realmente me encontré con algo maravilloso. Resulta que ahí iban las viejitas que nunca habían hablado y se largaban hablar, las mujeres, los jóvenes, todo el mundo se sentía protagonista y realmente presentaban proyectos para mejorar las condiciones barriales. Fue algo maravilloso, fue un principio verdaderamente y auténticamente democrático, pero fue dejado de lado y se perdió un gran arma en la democracia de base, la asamblea popular.
La entrevista también puede verse en video aquí: