Se están desarrollando importantes obras de remodelación y acondicionamiento en el segundo piso del ala oeste del edificio de nuestra Facultad, que incluyen el reacomodamiento de los distintos espacios que allí funcionan.
Al respecto, la secretaria de Planificación y Gestión Institucional, licenciada Cintia Pinillos, dio detalles de las tareas que se llevan a cabo. “El objetivo de estas obras de remodelación es poder maximizar el espacio de ese sector de nuestra facultad para poder trasladar allí el estudio del Laboratorio de Sonido (Labso) con un aula que esté comunicada para que los alumnos puedan tener clases mucho más dinámicas y adecuadas a las necesidades de ese área del conocimiento. Además se va a agregar un estudio nuevo, más pequeño, en el que se puedan desarrollar diferentes proyectos (grabar programas como el “Leéte algo”, desarrollar clases públicas, etc.)”. De esta manera se tendrá un Labso exclusivamente dedicado al dictado de clases y un laboratorio más pequeño destinado a grabar programas o a otro tipo de necesidades de las cátedras o áreas de la facultad.
“A mediados de marzo, antes de que comiencen las clases, ya van a estar habilitados los espacios remodelados de las dos escuelas (que serán dotadas con nuevo mobiliario) y las dos oficinas.
La idea de estas obras es que el edificio se vaya ordenando de tal manera que la mayoría de las actividades de cursado se realicen en el ala oeste y las funciones que tienen más que ver con cuestiones administrativas y demás se trasladen al ala este del edificio.
“En una segunda etapa, que está planificada para comenzar en marzo, se va a trasladar el bar de la facultad hacia el edificio del ala este (más próxima al río), en el lugar que hoy ocupa el Labso, para poder ganar el espacio de dos aulas en el lugar que actualmente ocupa el bar, siempre tendiendo a que el cursado se concentre en el ala oeste del edificio”, adelantó la secretaria.
Este tipo de refuncionalización del edificio permite que con recursos no tan elevados uno pueda lograr grandes cambios para lo que es el funcionamiento normal de la facultad. “En términos de ordenar un área específica de cursado y un área administrativa y por otro lado obtener beneficios que en principio son menores pero que si uno los observa desde el punto de vista que tienen en el cursado no lo son: por ejemplo tener un aula para trabajar en materias que necesiten el Labso y que tenga a la vista ese espacio, para que los alumnos mientras están desarrollando la clase puedan a su vez estar realizando prácticos en el laboratorio. Agrega un espacio más para la grabación de programas, pero a su vez permite ir ordenando y favoreciendo la circulación en la facultad y la identificación de los espacios para la gente que se acerca a ella ocasionalmente, para los ingresantes y demás”.
En tanto, y como parte de las reformas integrales al edificio de la FCPy RRII, la secretaria recordó que en septiembre pasado, en ocasión del Congreso sobre Democracia, se inauguró el aula 201, en la cabecera oeste del primer piso, que tiene capacidad para unas 80 personas. “Durante estos primeros meses de 2013 vamos a realizar su reacondicionamiento para que tenga la posibilidad de oscurecerse con cortinas especiales. Además, en este momento están concluyendo las obras, y probablemente podremos inaugurarla para el inicio de clases en abril, de un aula auditorio muy grande ubicada en la cabecera oeste del segundo piso. Esta aula va a poder ser utilizada para el desarrollo de clases con gran cantidad de estudiantes como ocurre actualmente con la 103, pero además va a estar pensada también como un auditorio para ocasiones especiales, para clases magistrales, simposios, etc. Además, va a ser un aula multimedia, equipada con un cañón, y se prevé que también va a estar refrigerada y calefaccionada”.
La secretaria también se refirió a los planes para un mejor aprovechamiento de las terrazas y espacios de cara al río. “En el ala este del primer piso tenemos una terraza que es un espacio fantástico hoy inutilizado. Nuestros edificios tienen una vista única y sin embargo cuando fueron construidos fueron pensados de espaldas al río. La idea es que las obras que vamos desarrollando recuperen paulatinamente esto que tiene que ver con la calidad de la estadía de nuestros alumnos, docentes y no docentes en la facultad. Por eso se pensó en la recuperación de la terraza del primer piso, que en principio va a ser la parte abierta del bar (como ahora es la explanada) y la idea es pensar más adelante qué puede ocurrir con la terraza que nos queda hacia el río en el segundo piso”, detalló.
“Para la realización de la obra del aula auditorio del ala oeste del segundo piso, además de utilizar la terraza se trabajó con una estructura de hierro ya que es el aula es mucho más grande de lo que era la terraza. Pero siempre con la idea de ir aprovechando los espacios que la facultad no utilizaba y que no sólo contribuyen de manera significativa a ampliar el espacio sino también a mejorar la habitabilidad de los mismos”.