El pasado viernes 16 de noviembre, en una sesión extraordinaria del Consejo Superior de nuestra Universidad fue declarada la Autonomía Disciplinar del campo de la Comunicación Social.
Un logro largamente esperado por nuestra comunidad académica que a lo largo de varias décadas –las que cuenta nuestra joven democracia recuperada, treinta años, y algunos más si contamos el pasaje de la carrera desde la Universidad Católica a la Universidad Pública y su tránsito por las facultades de Filosofía y Letras (hoy, Humanidades y Artes) y Derecho– desarrolló diferentes gestiones para alcanzar este objetivo que, en las palabras del filósofo Jacques Rancière quien visitó nuestra ciudad hace unos días, podría sintetizarse en la idea de emancipación intelectual. Hemos dejado atrás el estado de minoridad académica para ubicarnos en el plano epistemológico que le corresponde a nuestro campo de conocimientos y desde aquí proyectaremos el porvenir.
El expediente
En esta etapa, cuyo corolario ha sido la conquista de la Autonomía Disciplinar del campo de la Comunicación Social, las acciones institucionales se iniciaron hacia el final de la gestión del ex Decano Fabián Bicciré quien junto a la Directora de la carrera, Elizabeth Martínez de Aguirre, dieron un nuevo impulso a este reclamo a partir de la realización de una serie de consultas y reuniones con los referentes académicos e institucionales vinculados al tema, dentro y fuera de la carrera; dentro y fuera del sistema universitario mismo. De esta ronda preliminar de consultas surgirían los fundamentos del expediente posteriormente elevado al Consejo Superior y las adhesiones de diferentes organizaciones a la solicitud.
También es importante destacar que con anterioridad las diferentes gestiones políticas y académicas de la carrera habían emprendido acciones similares que se remontan a la década del ’70, antes de la dictadura cívico-militar, y que fueron retomadas después de la recuperación de la democracia hasta la obtención de este resultado que hoy nos enorgullece comunicar.
En la misma línea de trabajo, la Red de Carreras de Comunicación y Periodismo (REDCOM) realizó y difundió, a comienzos de este año, una Declaración sobre la Autonomía Disciplinar del Campo de la Comunicación que fue girada a los organismos educativos nacionales que entienden en el tema y a las universidades con carreras de comunicación para que cada una de ellas iniciara el expediente correspondiente con la solicitud de reconocimiento. Así, sumando las voluntades y decisiones del sistema universitario seguramente será más viable el reconocimiento de la autonomía disciplinar por parte de la Secretaría de Políticas Universitarias, el CONICET o la ANPCYT; por mencionar sólo algunos de los estamentos que tienen injerencia en el tema. En este contexto, la declaración de la Autonomía Disciplinar del campo de la Comunicación Socia en la Universidad Nacional de Rosario constituye un logro local y agrega un capítulo a un reclamo nacional.
En síntesis, el expediente –elevado por el decano Franco Bartolacci al Consejo Directivo de nuestra Facultad, en primer lugar, y luego al Consejo Superior de la UNR– fue iniciado por la Dirección de la Carrera en conjunto con la Secretaría de Posgrado, la Dirección del Doctorado en Comunicación y la Secretaría Académica el 7 de junio de 2012, conmemorando también el Día del Periodista y poniendo en valor el reconocimiento de la información como uno de los derechos básicos de los ciudadanos –ahora, jurídicamente establecido por la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual– y la centralidad de la tarea informativa como factor y motor de desenvolvimiento de la sociedad contemporánea y el mundo globalizado.
La sesión
La Autonomía Disciplinar del campo de la Comunicación Social (Expte. Nº 820/2012C.S.)fue declarada en una sesión extraordinaria del Consejo Superior realizada el 16 de noviembre pasado en el Salón Norte de la Sede de Gobierno de nuestra Universidad. Con la votación unánime de los Consejeros de los cuatro claustros presentes, se aprobó el expediente que fue comentado por algunos de los asistentes. El consejero no-docente de la Facultad, Eduardo Romero, celebró la resolución adoptada y le cedió la palabra a la Directora de la carrera, Elizabeth Martínez de Aguirre, quien agradeció a todos los que directa e indirectamente habían participado en la concreción de este objetivo tan deseado y esperado, destacando su importancia política y académica. El vice-Rector –Eduardo Seminara, que es egresado de la licenciatura y también estuvo presente en la sesión–, recordó los orígenes de la carrera y trazó un panorama de su desenvolvimiento destacando la importancia de la declaración de autonomía disciplinar. En el mismo sentido, el Rector Darío Maiorana y el Decano de la Facultad de Humanidades y Artes, José Goity, manifestaron su beneplácito. También acompañaron la sesión la Directora del Departamento de Comunicación y Lenguajes de la Escuela de Comunicación Social, Mirtha Marengo, y la Directora del Doctorado en Comunicación Social, Susana Frutos.
Los efectos
Entre las consecuencias concretas que se derivan del reconocimiento de la Autonomía Disciplinar del campo de la Comunicación Social –en el marco, claro está, de una fuerte consolidación de este espacio del saber– figuran la puesta en marcha de las siguiente acciones: 1) la incorporación de la disciplina comunicación social en la grilla de disciplinas incluidas en los formularios específicos de la Secretaría de Ciencia y Técnica de la Universidad Nacional de Rosario vinculados a la presentación de Proyectos de Investigación radicados en dicha Unidad Académica; 2) la consideración de la disciplina comunicación social en las diferentes convocatorias académicas –docencia, extensión, investigación– que tuvieren lugar en la Universidad Nacional de Rosario y 3) la solicitud del Consejo Superior de la Universidad Nacional de Rosario a los organismos nacionales pertinentes de incorporación de la disciplina comunicación social en la grilla de disciplinas existentes.